Capitulo 44

Juny no hizo como las demás. Se llevo a Shawn a un sitio bastante especial para ella. Llegaron a un centro comercial, el más grande de todo Madrid. Allí había una pista de patinaje artístico. La peliazul pidió dos pares de patines y le entrego unos al chico.

-¿Sabes patinar? –pregunto la chica sonriendo.

-¡Claro!

Ambos se calzaron los patines y fueron directos a la pista. Juny patinaba de escándalo, todas esas tardes yendo a patinar habían dado sus frutos. Shawn no se quedaba atrás. Los dos se movían con la gracia de unos patinadores profesionales. Los demás patinadores los miraban impresionados y con envidia.

Shawn se acerco a Juny por la espalda y la cogió de la cintura. La chica se sonrojo pero no se separo de él.

-Prepárate –le susurro al oído.

A Juny no le dio tiempo preguntar por que debía prepararse. Shawn la había lanzado al aire con mucha facilidad, como si fuera una pluma. Sin saber muy bien que hacer, Juny dio un par de vueltas en el aire para caer perfectamente en la pista. La gente a su alrededor aplaudió a los dos jóvenes.

-Increíble –dijo Shawn pasando por su lado. La chica sonrió y lo siguió.

Nos niños pequeños se acercaron a ellos tambaleándose.

-Queremos aprender a patinar así, ¿nos enseñáis por favor? –dijeron poniendo cara de corderito.

Juny y Shawn se miraron y asintieron.

Primero les enseñaron a mantener el equilibrio y avanzar sin caerse. Cuando ya sabían hacer eso les enseñaron a hacer algunos trucos sencillos.

Tras toda la tarde enseñando a aquellos niños a aprender a patinar llego la hora de irse.

-Gracias por todo, adiós –se despidieron los pequeños.

Ambos se despidieron con la mano de ellos sonriendo. Devolvieron los patines y se dirigieron a casa de Juny.

-Eres una gran patinadora –dijo Shawn con una sonrisa.

-¿Tú crees?

-Si, además de ser una gran profesora

-Gracias –Juny se sonrojo ante los elogios de Shawn.

Ya estaban llegando a su destino cuando…

-Gracias por llevarme a patinar, ha sido genial.

-No ha sido nada…

Juny volvió a sonrojarse e intento esconder su rostro para que no la viera, en esa situación tan vergonzosa. Shawn la hizo mirarlo y sonrió con dulzura. Acto seguido la beso sin darle tiempo a reaccionar.

-Me va a costar dejarte marchar… -susurro Shawn a su oído.

En ese momento Juny se dio cuenta de que ya estaban en su casa y debía entrar si no la regañarían.

-Yo tampoco me quiero ir –dijo abrazándolo con fuerza.

Se volvieron a besar y a regañadientes se separaron. Juny entro en su casa deseando que volviera a amanecer para ir a buscarlo. 

**************************************************

Juny espero que te guste. (Y a los demás también que no me olvido)