Akane llevo a Joe al casco antiguo. Anduvieron por
callejuelas un buen rato hasta que la chica se detuvo en un cruce y miro
pensativa a las 3 calles que había delante de ella. Joe la miro con curiosidad.
-¿Te has perdido? –le pregunto con la gotita.
-Noo, solo estoy pensado cual es el camino mas corto –mintió
la chica.
Joe no discutió con ella. Akane estaba perdida, pero no lo
iba a reconocer delante de él. Eligió el camino de la derecha. Estuvieron otro
buen rato andando ante de que la chica decidiera parar para pensar en “la mejor
ruta del paseo”.
El chico sabía que estaban perdidos, pero no dijo nada. No
quería herir a Akane así que la siguió sin rechistar.
Acabaron llegando a un cruce con dos calles. Akane tendría
que decidir de nuevo. Izquierda o derecha. Miró alternativamente a ambos lados.
Izquierda.
-Esto… ¿no sería mejor a la derecha? –pregunto Joe.
-No, ¿por qué?
-Es que a la derecha se escucha el tráfico.
Akane escucho atentamente. Él tenía razón. Se le había
pasado ese detalle. Tenía que pensar algo para salir del aprieto.
-Bueno, si, pero yo quería enseñarte algo mas del casco
antiguo, pero si quieres volver ya pues nada…
Joe la miró con la gotita pero no dijo nada. Recorrieron la
callejuela y efectivamente salieron a una calle principal que Akane conocía
bien. El se estaba empezando a ocultar y pronto anochecería.
-Será mejor que volvamos a casa… -dijo la chica.
Pero en el fondo no quería que eso pasara. Había disfrutado
de cada segundo que había estado con él. Se habían perdido pero Joe no le había
dicho nada. Era un gran chico. Separarse de él no estaba en los planes de
Akane, pero ¿qué podía hacer? Si se declaraba podía perderlo para siempre y eso
era algo que horrorizaba a la chica. Tal vez el tiempo podría decirle que hacer…
Pero tampoco quería esperar mucho tiempo…
El camino de vuelta fue silencioso. Akane acompaño a Joe al
albergue por miedo de que se perdiera por el camino y por que el albergue
estaba más lejos que su casa, así tenía más tiempo para estar con él.
Durante el camino no solo Akane estuvo reflexionando sobre
que era lo mejor que hacer. Joe también estuvo pensando y pensando. Y al final
llego a las mismas conclusiones que Akane. ¿Pero se podía permitir esperar?
Akane era una chica muy guapa, si no se declaraba ya era muy probable que la
perdiera. Ella tal vez no lo iba a esperar.
Llegaron a la puerta del albergue.
-Bueno, ya estamos –dijo la chica con nerviosismo.
Joe sonrió y la chica se dio cuenta de que no iba a poder
esperar. Si estaba a su lado y lo veía sonreír así no podría reprimir sus ganas
de saltar a sus brazos y besarlo.
La pelirrosa hizo un amago de ir a abrazarlo pero se detuvo.
El chico se dio cuenta. Eso tenía que ser una señal.
Joe beso a Akane con dulzura. Akane sintió que estaba en un
sueño. ¿De verdad esto estaba pasando? Si era un sueño no quería despertar.
Cuando se separaron, la chica con disimulo se pellizco el brazo con fuerza.
Dolía, ¡era de verdad!
El chico beso a Akane en la frente y se fue al interior del
edificio. La chica no se movió en un rato. Lentamente la pelirrosa se fue a
casa, pensando en lo bien que le había salido todo esa tarde.
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Espero que os guste ^^ Me repito mucho verdad? e.e